jueves, 19 de febrero de 2009

el matrimonio y la moda del divorcio


Sistemáticamente nos unimos en matrimonio con la sana intención de compartir aquello que creemos será un amor eterno.

Claro esta el amor eterno parece y cada vez mas no existir.

Desde el momento en que firmamos el maldito papel que legalmente acredita nuestro nuevo estado ahora de casados empieza la cuenta atrás.

Desde ese momento lo que era tan maravilloso se convierte en un contrato y como todo contrato tiene sus convenientes e inconvenientes y estos últimos son los mas.

Pasamos de estar algunas horas con alguien al que amas ha estar 24 horas al día sujeto a una obligación.

Pasamos de conocer a medias a nuestra pareja ha conocerla plenamente y como no ha conocernos a nosotros mismos.

Ello conlleva momentos muy agradables y situaciones nuevas no tan agradables, tu debes saber adaptarte y tu pareja también debe adaptarse a ti, de lo contrario estáis condenados a la ruptura pues la formula tu eres tu y yo soy yo aplicada a la unión de dos seres casi nunca o nunca es factible.

El desgaste, la monotonía pasan a ser tu mayor enemigo, no aprecias llegado el momento al que tienes a tu lado y lo siguiente pasa por realizar acciones individualistas, por desconectar de tu pareja.

Llegado el punto y ese punto cada vez llega mas pronto, nos planteamos la palabra de moda, quiero separarme y hay comienza el final del amor eterno que creíamos tener.

Últimamente entre los que mi adolescencia acompañaron entre risas y amoríos e detectado la ruptura de sus matrimonios y me ha hecho plantearme si realmente al unirse en matrimonio lo hicieron utilizando todos los sentidos o guiados por la ceguera del amor, muchos de ellos no han aceptado nunca el matrimonio en su forma y lo han intentado adaptar a sus formas de vida, sin la norma mas simple que es el amar a tu pareja en lo bueno y en lo malo, en la enfermedad y en la pobreza.

El matrimonio no tan solo es sexo, fiesta, alegría, momentos gratos, el matrimonio es compartir tu vida junto aquel aquella persona que amas en todos sus sentidos.

Un saludo y hoy olvidaros de divorciaros pues los juzgados están de huelga

6 comentarios:

Mónica dijo...

¡ya soy divorciada!

Bsss. me gustó tu blog, nos vemos.

ave fenix dijo...

A ver, no puedo evitar, sentirme incluido en tus comentarios y por ello pienso que tengo en derecho a la replica, así que voy a ejercerlo:
1º el problema de que hayan tantos divorcios no es otro que, ha cambido la manera de ver el matrimonio en nuestra sociedad, despojados de los roles prehistorícos de: El marido es para toda la vida, o peores tipo: "si te ha pegado algo habras hecho". Nos hemos vuelto muy intransigentes y rapidamente decidímos cortar por lo sano y empezar una vida nueva, De todas formas, te digo una cosa, cuando lo pienso fríamente . . . . me puedo arrepentir (como te dije por el facebook) de haber empezado, pero terminar . . . . a sido lo mejor que he hecho en muchos años

Anónimo dijo...

ave fenix me alegra que empieces de nuevo te lo merces hace tiempo que tendrias que aver dejado lo antiguo mas vale tarde que nunca

La casa de Pinel dijo...

monica encantado de tu presencia por aqui y ahora que ya se de la existencia en esta la gran blogsfera de tu blog, ya tengo otro lugar donde curiosear.
lo del divorcio es curioso pues ultimamente es un fenomeno que se extiende a pasos agigantados.
un gran saludo para ti

La casa de Pinel dijo...

ave fenix no te des por aludido pues nadie esta a salvo, este post es reflejo de la realidad social y hoy tu y mañana quien sabe si yo podemos estar entre los afectados.
tienes razon en lo de no arrepentirse ni de casarse ni de separarse pues cuando uno toma las decisiones debe hacerlo correctamente aunque no me negaras que en la decision inicial casi todos nos precipitamos, hombres y mujeres.
un saludo y cuidado con el carnaval

La casa de Pinel dijo...

anonimo uno utiliza asta el ultimo recurso para intentar salvar la relacion, a veces para bien y otras para mal pero hemos de respetar las decisiones de cada uno.
un saludo